Imagen: Las piedras del Padre Nazario. Foto por Roberto Perez Reyes.
El Centro Cultural Marina Arzola de Guayanilla informó que la Legislatura del Gobierno Municipal de Guayanilla aprobó oficialmente la Ordenanza Municipal Núm. 39, Serie 2024-2025, mediante la cual se declaran las Piedras del Padre Nazario, también conocidas como la Biblioteca de Agüeybaná, como bien del patrimonio del Municipio de Guayanilla.
Según se adelantó, esta ordenanza reconoce el valor histórico, cultural y arqueológico de este conjunto de petroglifos descubierto por el presbítero José María Nazario y Cancel a finales del siglo XIX. Legado que forma parte integral de la identidad y memoria colectiva del pueblo de Guayanilla.
La Ordenanza Núm. 39, firmada por el alcalde Raúl Rivera Rodríguez, el día 28 de abril de 2025, establece el reconocimiento oficial de las Piedras del Padre Nazario como patrimonio municipal. Además de que implementa medidas concretas para su protección, preservación y promoción. Incluyendo el diseño de estrategias educativas, investigaciones científicas y proyectos de conservación en colaboración con expertos en arqueología y cultura indígena.
“El reconocimiento de la Biblioteca de Agüeybaná como patrimonio municipal honra la figura del Padre Nazario. También reafirma nuestro compromiso con la defensa y difusión de nuestro legado ancestral”, expresó Nayda López Maldonado, presidenta del Centro Cultural Marina Arzola de Guayanilla.
Se añadió que este paso “representa un avance fundamental en la revalorización del patrimonio taíno y precolombino de Guayanilla. Además, sienta las bases para futuras iniciativas que fortalezcan la conciencia histórica y cultural de nuestra comunidad”.
El Centro Cultural Marina Arzola de Guayanilla invita a todos. La ciudadanía, instituciones educativas y organizaciones culturales a unirse a este esfuerzo de protección y divulgación. Para asegurar que “este tesoro patrimonial sea legado vivo para las próximas generaciones”, finaliza la nota de prensa.
Sobre las Piedras del Padre Nazario
Se cuenta que en 1880, el párroco de Guayanilla, Padre Nazario, recibió una colección de 800 piedras de una mujer que reclamaba ser descendiente del Cacique Agueybaná. A través del tiempo, este material arqueológico se endosó o se puso en duda por diversidad de investigadores en distintas épocas.